Las Guardianas originales de la tierra que después se convirtió en Atlantia, integraron la Hermandad de la Rosa, explica Kai junto a Ornai en una entrevista.
En un principio lo que conocemos como Atlántida se llamó Atlantia.
Se creía que Lemuria era más antigua que Atlantia, pero Lemuria y Atlantia fueron Ciudades de Luz paralelas y estaban en 5° dimensión.
Lemuria se encargaba de custodiar la vibración del Rayo Arco Iris, que es una frecuencia que al entrar en contacto con la consciencia humana le transmite amor, aceptación, compasión, fe, se considera como una señal para confirmar acciones.
En Lemuria había mucha diversidad de seres: sirianos, pleyadianos, elfos, etc. es decir, había diversidad cósmica, galáctica.
Y en paralelo existía la otra Ciudad de Luz que era Atlantia. La Mamá Ballena las está nombrando submarinas, Ciudades de Luz que se encuentran debajo del agua, sostenidas por los cetáceos: delfines, ballenas. Ellos sostienen esas Ciudades de Luz de 5° dimensión. Son ciudades cristalinas, ciudades hechas como de cristal, como si fuesen enormes cuarzos. Tienen formas muy orgánicas, construidas como con esferas, conectadas por túneles.
Atlantia era originalmente una ciudad submarina, custodiada por la consciencia cetácea. Atlantia era una variante de la consciencia cetácea. Estaba allí la Hermandad de la Rosa y de los Hombres Delfín, que eran en realidad Sirenas y Tritones. Era una Ciudad de Luz conectada con la consciencia cetácea, pero es otra octava de la consciencia cetácea porque las Sacerdotisas de la Hermandad de la Rosa eran Seres de Luz que provenían de las Pléyades, puras mujeres custodiando un mundo pequeño que ya existen en el agua a través de la consciencia de cristales. Estamos hablando de un mundo de 5° dimensión. En ese mundo las Sacerdotisas existen sosteniendo la consciencia de cristales y de flores: las rosas. La rosa es una energía que está conectada a las Pléyades. Está a su vez conectada con Sirio, de donde provienen unos Delfines que sólo existen ahí.
La consciencia cetácea es como una consciencia colectiva, y como tal existe en muchas distintas dimensiones a la vez. En cada dimensión tienen una consciencia diferente y una manera de experimentarla diferente.
En Sirio hay una conciencia cetácea sostenida por Delfines.
Pléyades representa la energía femenina y Sirio representa la energía masculina. Ambos mundos están conectados.
Entonces, ese mundo de donde procede la Hermandad de la Rosa está conectado con el mundo de Sirio y los dos existen en ambos. Los Delfines van a ese mundo de las Pléyades, y las Sacerdotisas van al mundo de Sirio. Y dentro de lo que es este gran entramado que son las Bibliotecas vivientes donde Sirio, Pléyades, Antares, Arcturus, Tierra, Venus, están todos conectados compartiendo información.
Los Delfines y las Sacerdotisas, hacen como una danza, un juego en su equilibrio de energía masculina y energía femenina. Aquí en la Tierra estas dos Familias vinieron a aportar a la humanidad esa energía que representa a lo femenino y a lo masculino en su equilibrio.
Esas dos energías también están adentro de cada uno de nosotros. La energía masculina inocente, juguetona, dulce. Y la energía femenina nutre, es amorosa, cuida.
Cuando ya conocemos esas dos energías, podemos saber cómo crear nuestra realidad que va a ser más armoniosa.
La energía que Atlantia sostenía como Ciudad de Luz se sostenía en el Rayo Coral. Lemuria sostenía el Rayo Arco Iris.
El Rayo Coral representa el equilibrio de las dos polaridades, la energía femenina y masculina. Y el color representa la encarnación de la consciencia de Divinidad en el ser humano. Es como la sangre que fluye por el cuerpo, iluminada. Los mejores ejemplos de lo que el Rayo Coral representa son los Maestros Jesús y María Magdalena, Consciencia Crística.
Es la capacidad que puede tener el ser humano de reconocerse como Ser Divino. Y eso ocurre cuando hay esa integración de energía femenina y masculina.
En su momento, Atlantia, a través de las Sacerdotisas de la Hermandad de la Rosa y de los Hombres Delfín, se encargaban de preparar energéticamente a través del sostén de este Rayo.
Lemuria y Atlantia sostenían Rayos de color para que funcionaran como Puentes para la consciencia que se encuentra encarnada en la 3° y la 4° dimensión para que pudiesen tener esa conexión con la 5° dimensión y pudieran recordar sus orígenes.
Esas Ciudades de Luz estaban sosteniendo la experiencia de la 3° y 4° dimensión. Y esas Ciudades de Luz no eran diferentes a los seres humanos, sino que son parte de una misma consciencia.
Es un llamado que nos está haciendo la Tierra a reconectar con nosotros mismos.
La energía femenina es esencial para lo que se está viviendo en estos momentos. El proceso de salto evolutivo ya nos está llevando a una integración de lo que es la vibración de la consciencia de la 5° dimensión, que existe como consciencia de unidad, no hay separación. Para eso se debe pasar por la sanación de las dos energías.
La dualidad es propia de esta 3° y 4° dimensión. Tenemos esas dos energías y es necesario equilibrarnos.
La energía masculina tiene una herida muy grande. A los hombres se los educó para suprimir la emoción, la expresión de la emoción se consideraba que era sólo una característica femenina.
Lo que añoramos es la energía de la Fuente que es femenina y masculina a la vez, al mismo tiempo es amorosa y nutritiva como la madre, y protectora como el padre. Todos tenemos ambas energías.
El gran desafío es entender la conexión y lograr despertarla y sentirla. Lo que unifica es el amor.
La Madre Tierra es tan especial, porque es ella quien nos convocó a vivir esta experiencia de la dualidad en su cuerpo y ella nos está acompañando y sosteniendo. Por eso es tan importante conectarnos con ella, porque nos ayudará a recordar lo esencial.
Los nuevos niños que llegan al planeta son nuestros ancestros pero más limpios, no tienen tanta densidad. Ellos vienen a comprobar que sí está produciéndose un cambio evolutivo en la Tierra. Ellos vienen a representar la nueva consciencia del ser humano. A medida que vayamos avanzando en el proceso, la tendencia va a ser que el ser humano vaya naciendo consciente de su propia conexión, por lo cual ya no va a necesitar a un pastor o a un líder que lo guíe por dónde tiene que ir.
Estos aportes fueron extraídos de una entrevista que le realizaron a Kai y Ornai.
A continuación comparto las dos partes de la entrevista:
Kai dijo en otra oportunidad que Lemuria fue una tierra donde los seres humanos vivíamos en una conexión multidimensional y con nuestro ADN totalmente activado, era una consciencia muy distinta a la que tenemos ahora. Sin embargo a lo largo de la historia esa conexión se fue perdiendo debido a que las personas fueron escuchando cada vez más a su ego. Recordar Lemuria es recordar el origen que te trajo a esta Tierra, cuál es la razón por la cual estás aquí, como alma multidimensional que eres. Esa época era muy particular, no existían los gobiernos, las personas desde el momento en que nacían eran reconocidas por sus padres y ellos ya sabían cuáles eran los dones que los hijos podían desarrollar, entonces desde el momento del nacimiento ya lo ponían en contacto con quienes serían los guías espirituales y también los que ayudarían en el proceso de desarrollo de los dones. No existía la educación como la conocemos ahora. Los lemurianos se autogobernaban en base al respeto de las leyes universales. Si todos respetáramos esas leyes no habría necesidad de gobierno, ni policías ni ejército. En base al respeto de esas leyes había una paz permanente en esas tierras. Lemuria estaba dividida en 5 sectores, cada uno de ellos tenía una vibración particular. Los seres que habitaban en cada uno de estos sectores tenían conexiones con distintos estados de consciencia y tenían conexiones con distintas habilidades y formas de trabajar.
En la Atlántida, aquellos que habían perdido la conexión con la Fuente buscaron experimentar con el ADN, para crear mutaciones y tratar de desentrañar los Códigos de Luz contenidos en el ADN humano, Códigos que facilitan el acceso a las Salas de Registros Planetarios y a los Portales de la Luz. A su vez, por primera vez se genera la separación de la energía femenina y masculina a nivel colectivo, luego de que se viera interrumpida la labor Planetaria de Amor Incondicional que en esa Tierra la Hermandad de la Rosa llevaba a cabo.
Los Atlantes no sólo alteraron el Código Genético, también crearon un poderoso vórtice de energía que terminó colapsándose y fracturando las Rejillas Planetarias ocasionando que se generara una gran anomalía magnética que dio origen al triángulo de las Bermudas, finalizando con ello las eras antiguas de Luz a nivel Planetario y una profunda, muy profunda herida que hasta la fecha se ha sostenido en la consciencia de la humanidad.
Fue hasta el nacimiento de Jesús y María Magdalena que se da origen al nuevo intento de restablecimiento de la Biblioteca Viviente Tierra. En esta ocasión la fuerza de este renacer de la Luz se activa una vez que los Seres Humanos asuman su responsabilidad sobre el cuidado de la Tierra y de todos los Seres Vivos.
Esta consciencia de responsabilidad ha comenzado a despertarse de manera colectiva en todos los seres humanos. Por ello cada día son más las personas que se ocupan del cuidado del medio ambiente y de la Vida y respeto hacia los animales. Somos Guardianes de la Tierra y en su cuerpo viven las llaves para el restablecimiento del Plan Divino, la Biblioteca Viviente. Sin embargo, es de suma importancia que cada uno active su propia Sabiduría interior y la Maestría que habita en el corazón. Pues al recuperar el Poder toda la Luz se activa en el Ser Humano.
Aporte de Gladys Sofía Fernández integrando los anteriores conceptos con los hechos acontecidos en la vida de Arturo y Morgana:
Morgana es la llama gemela de Arturo, ellos son medio hermanos, comparten la madre que tienen en común.
Arturo es descendiente del linaje de Jesús, son como plantillas que se repiten entre Jesús y Arturo.
De la relación del padre de Arturo y la madre de Morgana, nace Arturo. Morgana era más grande que Arturo.
Merlín toma a Arturo y se lo lleva para formarlo, para que cumpla con el plan de instalar a nivel genético la consciencia Crística.
Arturo y Morgana crecen en distintas islas.
En la festividad de Beltaine se seleccionaban parejas y sin saber la identidad mutua, reúnen a Arturo y Morgana, y fruto de esa unión, nace un hijo. Cuando ellos se dan cuenta, sienten que hubo manipulación al ser unidos en esa festividad de Beltaine. Morgana rechaza al hijo y no lo cría. Arturo y Morgana ya habían tenido conexión en otras vidas. Lo que ocurrió entre ellos movilizó todo lo que había ocurrido en la Atlántida. La carga emocional de abandono, separación, etc, removió lo que había pasado antes, y se sintieron traicionados.
El sagrado femenino y el sagrado masculino están en todos nosotros.
A la energía masculina le corresponde el impulso, es guardiana de transformación y movimiento para que surja la creación.
La energía femenina es sinónimo de receptividad, flujo, abundancia.
Si la energía masculina y femenina están en equilibrio, hay confianza para que los hechos se concreten.
Las dos energías están en nosotros:
Pensar (impulso) + Sentir = Explosión de energía, sonido y luz que viajan en todas las dimensiones.
Sufrimiento, adversidad y dolor se producen si no están en equilibrio las energías femenina y masculina.
Atlántida sostenía el Rayo Coral, permitía que el Planeta se preparara para el nacimiento de la Consciencia Crística.
Lemuria, Atlántida y Shambala son Guardianes de la humanidad, hermanos mayores en 5° dimensión, que la humanidad irá alcanzando.
Voces Unidas con Elsa Farrus, Carla Calcaterra y Sara Herminda Calchevite
La hermandad de la Rosa
Profecía de los Cátaros
Energía Crística Femenina
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